¿ que haces tu por aquí? [Lucius]

Estaba desvelada no habia podido dormir por mas que lo inetentaba y estaba harta de dar vueltas por la sala común necesitaba despejarme, salí de allí vestida con lo primero que pille y la tunica con cuidado de que no me viera nadie, ya que era por la noche y no queria un castigo, decidí ir a la torre de astronomia tenia unas buenas vistas llegué hasta ella esperando que no hubiera nadie y me asomé al balcon donde me apoyé en la barandilla mientras observaba los exteriores donde no habia ni un alma una brisa suave vino en mi dirección e hizo ondear mis cabellos cobrizos supiré se esta muy agusto allí.

Otra noche mas que no podía dormir, pero esta vez no tenía ganas de ir al campo de Quidditch. Así que pensé mejor en subir a la torre de astronomía para tomar aire y estar tranquilo. Al entrar me sorprendí bastante al ver a una figura de espaldas. Me acerqué procurando no hacer ruido. Cuando estaba mas cerca reconocí quien era. Me quedé mirando como el viento movía su pelo.
-Al ser prefecto tendría que quitarte puntos, por no estar en la cama a estas horas.-dije acercándome mas a ella con una pequeña sonrisa en los labios.

oí una voz desconocida cerca de mí y me dí la vuelta nunca esperé encontrarme allí a Lucius Malfoy no deije nada solo le observe con mis ojos azulados mientras el aire continuaba haciendo que mis cabellos se alborotaron despues de unos segundos decidií contestar.
-¿tendrias? ¿acaso no lo vas a hacer?-pregunte por simple curiosidad volví mi vista hacia el balcon donde en el firmamento estaba plagado de estrellas que se reflejaban en mi mirada.

La miré a los ojos, quedándome quieto unos instantes. Sus ojos eran hipnotizantes en ese momento.
-Estoy pensando si hacerlo o no.-dije acercándome a la barandilla sintiendo el viento. Cerré los ojos unos instantes y los volví a abrirlos para mirarla.
-¿Crees que debería hacerlo?-le pregunté volviendo a mirar fijamente sus ojos.

noté como miraba a mis ojos fijamente, cierto que mis ojos eran lo que mas destacaban de mi rostro y lo que mas me gustaban escuche su pregunta.
-Yo te diriía que no porque solo estoy aquí porque no podia concidial el sueño- dije con una media sonrisa- Sin embargo Luego tu harás lo que prefieras ahí yo no puedo cambiar nada- respondí mirandole detenidamente a sus ojos.

Sonreí.
-Mhm, yo estoy aquí por lo mismo... Creo.-dije encogiéndome de hombros. Me acerqué un paso hacia ella y me apoyé en la barandilla.
-¿Quien te dijo que no podías cambiar nada?-le pregunté con una sonrisa pícara, sin poder dejar de mirar sus ojos

asenti al escuchar lo primero que dijo
-¿crees?- dije mirandole no habia entendido eso luego vi su sonrisa en sus labios, y le miré alzando una ceja mientras echaba aun lado la cabeza en gesto interrogante -¿a sí? entonces, ¿como lo podria cambiar?,- dije mirandole estaba claro que posiblemente acabara diciendo mi pequeña excursión nocturna.

-Si, creo. A lo mejor tuve el presentimiento de que ibas a estar aquí y por eso vine.-contesté con una media sonrisa. Puse una mano en su cintura y la acerqué hacia mí, aunque no mucho.
-No se. ¿No se te ocurre algo?-pregunté acercándome un poco a ella. Pasé el dedo pulgar por su mejilla acariciándola.

reí y rodeé los ojos observé como me acercaba contra él - ¿ acaso eres omnisciente o esque me espias? -dije mirandole mientras sonreía de lado.
me aperté de él aigual que aparté su mano de mi mejilla el contacto fisico era algo que yo agradecia pero no de esta forma cuando no habia apenas confianza.
- se me ocurren cosas pero, prefiero dejarlo a su eleccion señorito prefecto- dije mirandole .

Una pequeña sonrisa se dibujó en mis labios
-Quién sabe... Puede ser que sea omnisciente o a lo mejor te espío. Te dejo adivinarlo.-dije encogiéndome de hombros levemente. Al ver que se apartaba y apartaba mi mano de su mejilla arqueé una ceja.
-¿Te molesta que te toque, acaso?-le pregunté apoyándome en la barandilla mirándola fijamente.

reí - digamos que no soy muy buena en adivinación, preferiria que me lo contases tu- respondí sonriendo mientras le miraba.
-No me molesta que me toquen, pero apenas te conozco - respondí mirandole mientras alzaba una ceja.